Fuente: La Jornada
Al señalar que el modelo de rescate bancario de los años noventa no va a regresar "nunca jamás", el presidente Andrés Manuel López Obrador demandó que en el empleo de los 750 mil millones de pesos autorizados por el Banco de México para apoyar a pequeñas y medianas empresas se cuide que los recursos realmente se dirjan a ese sector y no sirvan para salvar a grandes corporaciones o bancos.
"Hay que tener mucho cuidado, porque el Banco de México es una institución autónoma y hay que respetar sus decisiones. Pero sus reservas no son del Banco de México, ni siquiera del gobierno, sino de la nación. Así todos los créditos hay que cuidarlos, porque si no se carga a la hacienda pública, se tiene que pagar con presupuesto, que es dinero del pueblo".