Fuente: La Jornada
La Secretaría de Economía (SE) analiza cuáles serán los productos de Estados Unidos a los que impondrá arancel y cuya tasa también deberá determinar para cada caso, como resultado de las represalias comerciales que la Organización Mundial de Comercio (OMC) le autorizó por un monto que no rebase los 163.23 millones de dólares, al ganar la llamada “guerra del atún” que inició procesalmente desde 2008 aunque el conflicto data desde finales del siglo pasado.
“No se otorga ningún dinero en efectivo (a la flota atunera nacional, perjudicada por el etiquetado “dolphin safe” que impuso Estados Unidos). La OMC nos autoriza que si un producto estadunidense tenía cero arancel, ahora nosotros podemos suspender ese beneficio y empezar a cobrar, no sé, 5 o 10 por ciento de arancel. Nosotros estamos haciendo el análisis en qué productos se aplicará. La OMC no determina qué productos son sujetos de esto. En México tenemos que hacer un análisis de manera muy detallada porque lo que se está buscando es que cambien las condiciones de las legislaciones de Estados Unidos y que nos permitan el piso parejo (para el atún mexicano). Esto no tiene que verse como una manera en que vamos a incrementar de manera indiscriminada los aranceles”, explicó Juan Carlos Baker, subsecretario de comercio exterior de la SE en una entrevista radiofónica con Denise Maeker.