Fuente: Notimex
Los
empresarios mayoristas del sector abarrotero destinan anualmente, en promedio,
hasta seis millones de pesos por concepto de pago de luz, por lo que la
iniciativa de reforma energética es una opción viable para reducir dicho gasto
en el sector.
Así
lo aseguró el director de la Asociación Nacional de Abarroteros Mayoristas,
Iñaki Landaburu Llaguno, al señalar que las propuestas de reforma “son
bienvenidas en la medida que favorezcan costos menores en el consumo de energía
eléctrica, gasolina o diesel”, aunque los resultados se verían a largo plazo.
Expuso
que para los más de cinco mil 78 proveedores industriales y comerciales,
quienes cubren aproximadamente el 82 por ciento de los puntos de venta
detallista en el país, el consumo de combustible implica una erogación
económica significativa en su actividad productiva.
En
un comunicado, el directivo informó que la ANAM analiza todas las propuestas de
reforma legislativa presentadas, como lo es la de los partidos Acción Nacional
y de la Revolución Democrática, y la del presidente Enrique Peña Nieto.
No
obstante, destacó que mientras se lleva a cabo dicha reforma, los asociados
consideran usar energía eólica para generar ahorros entre un 5.0 y 15 por
ciento.
Refirió
que para la ANAM es más inmediato impulsar los planes de energía a base de
foto-celdas, para tener en menor tiempo y a menor costo energía renovable,
incluyendo la eólica que es la más barata.
Landaburu
Llaguno aclaró que aun cuando la energía eólica todavía no se vende a terceros,
miembros de la Asociación de Abarroteros analizan la posibilidad de afiliarse a
los parques eólicos que hay en algunos estados del país, como Tamaulipas y
Oaxaca, con el fin de hacer uso de este energético.
Resaltó
que como iniciativa privada en grande, mediano o pequeño, los abarroteros están
obligados, por ideología y valores, ir a la vanguardia más allá de las
decisiones que se tomen a través del los tres Poderes de la Unión.
Por
ello detalló que la ANAM ya cuenta con cinco grandes proveedores de energía de
foto-celdas y a más tardar en un año varios miembros de la Asociación podrían
comenzar a utilizar esta energía renovable.
Apuntó
que de acuerdo con datos del Anuario Estadístico 2012 de Petróleos Mexicanos,
en los últimos 11 años la demanda de gasolinas aumentó 44.9 por ciento y su
producción sólo 2.6 por ciento, y en el caso del diesel, el incremento de la
demanda fue de 39.1 por ciento y su producción se redujo 2.8 por ciento.
Así
entre 2001 y 2011 el precio de la gasolina magna se incrementó 73.4 por ciento
y el diesel 116 por ciento.
Sólo
a agosto pasado, los incrementos acumulados fueron de 86.2 por ciento para la
gasolina magna y de 132 por ciento para el diesel, lo cual habla de lo
“complicado que es para el sector abarrotero el trasladar alimentos y buscar
mantener precios competitivos”, concluyó.