Fuente: El Financiero
El día en el que el mundo se detuvo llegó la incertidumbre y la angustia, conforme pasaban los días nos llenábamos de información que nunca habíamos escuchado, todo vinculado con la crisis mundial en la que estábamos los del norte y los del sur, juntos compartimos el mismo sentimiento: el miedo. Sin embargo hubo quienes nunca pararon y ayudaron a cubrir nuestras necesidades básicas, “las tienditas de la esquina”, esos lugares en donde como por arte de magia encontramos todo lo que buscamos para hacer más fácil las labores de la casa, los antojos para pasar el rato, sin olvidarnos de las bebidas que nos acompañan a la hora de comer, mientras platicamos en familia.
Durante la pandemia y debido al confinamiento, “las tienditas de la esquina” son de los negocios más afectados, en México hay un millón 200 mil pequeños comercios; 700 mil son tiendas de abarrotes; lo que significa que 700 mil tenderos pueden estar en peligro; y por cada tienda dependen 2.5 familias que se puedan poner en problemas, asentó Luis Incháustegui, Director del Instituto de Investigaciones Sociales.