Fuente: El Financiero
Ante precios de alimentos y energéticos más altos y una desaceleración del crecimiento económico, el descontento social puede empeorar en los países de América Latina y el Caribe, por lo que los gobiernos deben implementar mecanismos de apoyo para los hogares vulnerables y de bajos ingresos, recomendó el Fondo Monetario Internacional (FMI), al estimar un crecimiento del PIB de la región de 2.5 por ciento en 2022 y en 2023.
“Para garantizar la cohesión social y reducir el riesgo de tensión social, los gobiernos deberían proporcionar apoyo focalizado y temporal a los hogares vulnerables y de bajo ingreso, y dejar que los precios internos se ajusten en función de los precios internacionales. Esto ayudaría a los grupos vulnerables y contendría los costos fiscales, además de incentivar la producción y moderar el consumo”, señaló el equipo del Departamento del Hemisferio Occidental en el blog del organismo.