Fuente: El Financiero
En medio de acusaciones mutuas de corrupción entre el sindicato de la General Motors y su disidencia, de una guerra de información falsa, así como de denuncias de injerencia de la 4T y de uniones de trabajadores extranjeras, los 6 mil 400 empleados de la planta automotriz de Silao, Guanajuato, votarán este 17 y 18 de agosto si están de acuerdo o no, con el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
A los trabajadores del establecimiento los atemorizan diciéndoles que si votan por el no al CCT, GM se llevará su producción a otro país, o que perderían sus salarios y prestaciones laborales, aunque expertos advierten que esto es falso.