miércoles, 28 de octubre de 2015

Aunque pellizque de aquí y de allá, el día de muertos vivirá

Fuente: Redacción 

Considerada como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad desde el 2003 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), la celebración del Día de Muertos en nuestro país es una tradición muy arraigada, principalmente entre las comunidades indígenas,  no tanto así en las zonas urbanas donde, en los últimos años el festejo incluye también aspectos de índole extranjera como los disfraces del Halloween estadounidense.

La declaratoria de la UNESCO contempla esta situación al afirmar que "...aunque la tradición no está formalmente amenazada, su dimensión estética y cultural debe preservarse del creciente número de expresiones no indígenas y de carácter comercial que tienden afectar su contenido inmaterial”. 

Por ello, las políticas culturales adquieren tal relevancia a la hora de promover la continuidad de esta tradición, sobre todo con información acerca del significado y relevancia del Día de Muertos en nuestra cultura que, aunque en el caso de las grandes ciudades, se vea acometida por elementos extranjeros, se tenga el pleno conocimiento de lo que en verdad estamos celebrando. En el entendido, también, de que la cultura es dinámica y a lo largo de los años, incorpora y desincorpora aspectos de otras culturas.

TRADICIÓN VIVA

“La tradición de los días de muertos es una tradición que sigue presente en los pueblos indígenas y tiene diferentes manifestaciones según sean los pueblos. También sigue presente en muchos sectores de la sociedad, de las clases populares y también ha ido generalizándose en muchos lugares la utilización de los elementos tradicionales del día de muertos porque en las escuelas, poner la ofrenda, es parte de las actividades que tienen”.

Así lo dijo en entrevista para México Nueva Era el antropólogo Víctor Manuel Rojo Leiva, director de investigación de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), al considerar la vigencia de esta celebración.

Por su parte la antropóloga Amparo Rincón Pérez, jefa del departamento de colecciones del Museo Nacional de Culturas Populares (MNCP) explicó que quizá en las ciudades sí se vea un tanto diluida la tradición del Día de Muertos, pero que en el resto del país tiene un arraigo muy profundo por su mismo origen prehispánico.

“Estas festividades indígenas tienen un peso cultural muy importante; están relacionadas con el ciclo agrícola, es el fin del ciclo agrícola y es una forma de corresponderle a la tierra lo que durante un año nos proporcionó. Por eso es que las ofrendas las vemos con mucho colorido, con muchísimos elementos naturales como son la tierra, por ejemplo, el agua, el fuego, el aire,  y lo que la tierra nos proporciona que son, en este caso, las flores y los frutos, básicamente”, dijo.

THIS IS HALLOWEEN

De acuerdo con los especialistas, la misma dinámica de la cultura hace que el Día de Muertos sea una festividad flexible y llegue a incluir aspectos de otros países y de otras culturas.

Lo que sucede, afirmó el antropólogo Víctor Manuel Rojo es que “se va dando toda una mezcla de costumbres, porque, al mismo tiempo que en las escuelas se siguen poniendo las ofrendas en los altares, pues aparecen las calaveritas, pero también aparecen elementos que son propios de lo que ahora se conoce como el Halloween”.

En este tenor, se pronunció Everardo Pillado Pacheco, integrante del Colectivo Multidisciplinario “Los olvidados”, que se dedica a promocionar las tradiciones que emanan de la cultura popular como el Día de Muertos: 

“No sé si lamentarlo o celebrar que la cultura es una cultura viva, por tanto se renueva, se degenera en algunos momentos, y desde muchos años para acá, hemos visto cómo se incluyen, por ejemplo, aspectos de Halloween, de otras culturas”.

En la misma línea, la antropóloga del Museo Nacional de Culturas Populares, Amparo Rincón, coincidió en  existe una injerencia de elementos propios del Halloween en la manera de celebrar el Día de Muertos  en las ciudades, y lo atribuyó, de cierta manera a los medios de comunicación, “pues estamos recibiendo mucho bombardeo de tradiciones extranjeras como el Halloween, entonces ahora es común que los jóvenes quieran vestirse de vampiritos, de brujitas, de disfraces que, en ocasiones, no tienen nada que ver con nuestra tradición y que muchas veces es como entrarle como al cotorreo”.

En este sentido, añadió la experta, “yo les digo a los jóvenes: oigan ustedes en lugar de dar miedo, dan asco; todos llenos de sangre, llenos de telarañas. Así no es la cosa. Me dicen, sí pero es que es para el cotorreo. Entonces pensemos que es para el cotorreo”, enfatizó Amparo Rincón.

El maestro artesano Sotero Lemus, cartonero, quien montó un altar de muertos en el Museo Nacional de Culturas Populares, dijo que, efectivamente, “se está arraigando más, de alguna forma, en el día de muertos, el aspecto de disfrazarse y pedir su calaverita, un tanto al estilo del Halloween. Digamos que está tomando esa percepción, esa faceta, copiando un poquito lo que es el esquema extranjero, pero bueno, obviamente tomando todavía la cultura de nuestra calavera, de nuestra ofrenda”. 

EL DÍA DE MUERTOS ES SAGRADO

Como dicta el lugar común: de la muerte nadie se salva, y de la tradición que la conmemora en México cada 2 de noviembre, tampoco. Así que, de acuerdo con los entrevistados, el Día de Muertos es una celebración que seguirá vigente, porque la esencia está en honrar a los muertos y esta es la característica principal que la ha convertido en patrimonio de la humanidad, pues "ese encuentro anual entre las personas que la celebran y sus antepasados, desempeña una función social que recuerda el lugar del individuo en el seno del grupo y contribuye a la afirmación de la identidad...", según la declaratoria de la UNESCO.

Para unos, la celebración del Día de Muertos se transformará.  “Yo creo que con la incorporación de otros elementos culturales ajenos a las tradiciones de los pueblos indígenas de México, en las ciudades, en los núcleos urbanos, la celebración va a cambiar, y va a incorporar nuevos elementos, de manera que es una celebración que está arraigada en honrar a los muertos y creo que eso es el sentido que sigue prevaleciendo en México, además de que, independientemente, se incorporen elementos propios del Halloween anglosajón”, aseguró el antropólogo de la CDI Víctor Manuel Rojo.

Para otros, es una fiesta que perdurará. “Sí es cierto, la cultura se va moviendo, no podemos exigir que sea estática; está en constante transformación, pero yo creo que es cuestión de información para que estos jóvenes sí, se diviertan, pero también consideren la importancia que tiene la ofrenda y la festividad del Día de Muertos en nuestra cultura, en nuestra tradición y parte de nuestra identidad”, aseveró la antropóloga Amparo Rincón.

Como ejemplo de la fuerza de la tradición, la funcionaria relató el caso de que con las Leyes de Reforma se prohibieron las celebraciones religiosas, “y una festividad que no pudieron como eliminar fue la del día de muertos. Ahí, descuéntenles el día, sanciónenlos, pero el día de muertos es sagrado”, aseguró.

Para Everardo Pillado, del Colectivo “Los Olvidados”, su pronóstico es reservado: “Yo no podría arriesgarme a decir qué es lo que va a pervivir, de pronto, no sé si estas influencias extranjeras o de otras culturas tengan ese arraigo en el pueblo, en la tradición mexicana, no lo sé. Yo creo que a pesar de eso, pues lugares tan maravillosos como los museo, las plazas públicas, muchas casas familiares, Mizquic, que siempre será un ejemplo que está dentro de la ciudad y se convierte en un gran panteón en estas fechas, yo creo que todo esto sigue contribuyendo a enriquecer la tradición, a transformarla, sí, pero a que perviva”.

Finalmente, el maestro artesano Sotero Lemus nos conmina a mantener y fomentar la tradición del Día de Muertos. “Tal vez pasen algunos años hasta que se pierda totalmente la concepción de nuestras tradiciones, sin embrago, como museo, como casa de cultura y como artesano, yo creo que en cada espacio, en cada lugar, tratamos de que la gente, las nuevas generaciones conozcan lo que son nuestras tradiciones, nuestro culto hacia los seres que ya no están con nosotros y nuestro colorido, en este caso presentado, precisamente, lo que son nuestras ofrendas ancestrales”. 

No olvidemos que la celebración del Día de Muertos en México está considerada como patrimonio de la humanidad, y como tal es deber del gobierno promoverla y difundirla; es imperante que los medios de comunicación coadyuven en esta labor, y es necesario que la gente siga honrando la memoria de sus seres queridos con un altar de muertos, desde el más básico y sencillo, hasta el más creativo y suntuoso. 

Feliz Día de Muertos

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