Mayor austeridad en 2016

Fuente: El Universal

El rediseño del gasto público de 2016 implicaría un recorte de entre 200 mil y hasta $250 mil millones debido al escenario económico más complejo donde no habrá coberturas petroleras y al que se sumarán los efectos que generará un entorno de mayores tasas de interés, dijo el Instituto Mexicano de Contadores Públicos.

En conferencia de prensa, el presidente de la Comisión de Análisis Económico del IMCP, Ernesto O’Farril, reconoció que es muy probable que debido a estos factores el ajuste presupuestal sea de dimensiones superiores a las de este año, que fue de 124 mil 300 millones de pesos.

En este sentido explicó que el cálculo de entre 200 mil y 250 mil millones de pesos al recorte presupuestal de 2016 sería en caso de que la inminente alza en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banxico fueran graduales.

“Es probable un mayor recorte del gasto público respecto al que vimos en 2015. Calculamos que puede ir de 200 mil a 250 mil millones de pesos, algo así como 1.4% del PIB. Esto en un escenario donde el alza de tasas de interés se da de manera gradual. Si el movimiento de tasas fuera más violento entonces el ajuste del gasto será mayor”, detalló el experto.

Y es que de cualquier forma, el alza en las tasas de interés tendrá un impacto no sólo contra el crecimiento económico, sino también para las finanzas públicas, “ya que el Estado tendría que pagar mayores intereses por su deuda”.

El representante del IMCP dijo que junto a esta revisión que hará el gobierno federal al gasto público se debe acompañar de una política fiscal más amigable, de forma que se fomente el empleo y la inversión.

En tanto, el presidente del instituto, Leobardo Brizuela, dijo que es necesario eliminar todo aquel gasto superfluo y que no sirve para el desarrollo económico del país.

Afirmó que como parte del G6 (grupo de instituto) la contaduría pública insistirá en que haya una revisión del esquema fiscal para dinamizar el mercado interno sin que se descuide la recaudación tributaria.

Sobre la situación, Ernesto O’Farril, presidente de la Comisión de Análisis Económicos del IMCP, aseguró que si el Banco de México sube las tasas de interés, puede frenar la depreciación del peso frente al dólar, además de que esto le pegaría al crecimiento y a las finanzas públicas, ya que “el Estado tendría que pagar mayores intereses por su deuda”.

“El peso mexicano es la moneda emergente más liquida del mundo, y los especuladores globales se aprovecharían de las circunstancias. Banxico no puede apreciar al peso artificialmente cuando todas las monedas se están devaluando contra el dólar”, puntualizó el funcionario bancario.