Fuente: Redacción
La ausencia de instituciones modernas, eficientes y transparentes, se han convertido para las naciones de la región de América Latina el ancla que acota la capacidad de generar crecimiento sostenible y prosperidad incluyente.
Gerardo Gutiérrez, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, destacó así la preocupación emergida del Foro Económico Mundial, Capítulo América Latina, marco en el cual se advirtió que en la región y en particular en México, el subdesarrollo institucional determina en gran medida el subdesarrollo económico.
“Los países se estancan o fracasan sin un desarrollo institucional que asegure los cimientos básicos de seguridad, legalidad, orden y confiabilidad de las instituciones, sin estos pilares consolidados, seguiremos sin dar los pasos definitivos al desarrollo”.
Lamentó que hoy en día, las instituciones, en lugar de ser un factor que aliente el crecimiento económico y tener un rol de inclusión, se hayan convertido en un obstáculo o impedimento, además de haber adquirido un papel extractivo para la sociedad.
En el caso particular de México, Gutiérrez Candiani sostuvo que si bien en el contexto regional, es un país que ha despuntado sobre la mayoría, con una mejor expectativa de crecimiento y como destino de inversión para este año y el siguiente.
En un ejercicio de auto-crítica y visto con otro enfoque, el dirigente de la máxima cúpula empresarial, sostuvo que “tenemos una perspectiva menos adversa que otras economías similares o emergentes, en función de las circunstancias internacionales vigentes”.
Lo anterior derivado, dijo de la puesta en marcha de reformas estructurales, las cuales siguen despertando un gran interés para los inversionistas y también de países que están buscando fórmulas y alternativas para ampliar su potencial de crecimiento.
Sin embargo, el reto permanece mayúsculo y se comparte con los países de la región, y donde destaca la urgente necesidad de fortalecer a las instituciones, la desconfianza en la clase política, la poca regulación gubernamental y la confiabilidad de las policías.
Que sumado todo, da como resultado una falta de crecimiento, ausencia de equidad y freno para la competitividad, y que en México exige la presencia de gobiernos, en los tres niveles y todos los poderes, que no claudiquen en el combate al crimen organizado y a la aplicación puntual de la ley, sin excepciones, como el vandalismo, la corrupción o la subversión violenta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario