Fuente: Norma Patiño Villalobos
Iñaki Landáburu Llaguno, Director General de la Asociación Nacional de Abarroteros Mayoristas y de la Asociación Nacional de Distribuidores de Vinos y Licores (ANDIVyL), denunciaron la creciente operación del mercado ilegal de bebidas destiladas en México por parte de empresas importadoras y distribuidoras de vinos y licores, con lo que se sustenta que existe contrabando, subvaluación y evasión fiscal en este sector generando una competencia desleal.
Esta actividad ilegal genera ventas por casi 21 mil millones de pesos a estas comercializadoras al colocar, en el mercado, más de 20 millones de cajas con 9 litros, cada una, de bebidas destiladas.
El mercado ilegal con relación al total del valor de bebidas destiladas en el país representa el 43 por ciento e implica una pérdida fiscal de casi 6 mil 385.7 millones de pesos que deja de recaudar la Secretaría de Hacienda y Crédito Público por concepto del cobro del 53 por ciento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), más el 16 por ciento de IVA.
Por lo anterior, la ANAM y ANDIVyL, están trabajando con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a través del Sistema de Administración Tributaria y la Procuraduría Federal del Consumidor, para terminar con el contrabando, la subvaluación y la evasión de impuestos por la venta de bebidas destiladas ilegales en México, por ser competencia desleal para el sector.
Iñaki Landáburu Llaguno, indicó que las cifras del mercado ilegal de bebidas destiladas en México corresponden al 2013, de acuerdo al estudio solicitado a la empresa Euromonitor International, en donde se indica que el mercado legal en México es el 57 por ciento y quienes sí pagan impuestos por 9 mil 948 millones de pesos.
De ahí que el sector esté sosteniendo acuerdos con el Sistema de Administración Tributaria para detener esta problemática en la que están involucradas empresas nacionales, importadoras y distribuidoras de vinos y licores que aplican un “contrabando técnico”, operando desde Nuevo León, Ciudad de México y Jalisco; e importando con facturas subvaluadas la mercancía desde países como Panamá y Venezuela.
Se tiene conocimiento, dijo, que las ventas de estos productos se hacen desde el estado de Nuevo León e incluso algunas empresas como “Linio” lo hacen a través de internet, entregan en casa, sin factura, sin desglose de impuestos y en ventas por debajo del 20 o 25 por ciento en productos como Whisky Jonnie Walker Etiqueta Negra, Chivas Regal, Grand Marnier, Buchannan’s y muchas más.
Otras empresas que operan de esta forma y que son claramente identificadas son Distribuidora de Vinos y Licores Álamo S. A. de C. V. y Coproimports S. A. de C. V., así como tiendas Five Liquor Store, agregó el Director General de la Asociación Nacional de Abarroteros Mayoristas.
El líder empresarial señaló que existe un acuerdo de colaboración con el SAT el cual debe reactivarse pues tiene como objetivo prevenir, identificar y llevar a cabo acciones tendientes a combatir la producción, importación y comercialización de bebidas alcohólicas, gracias al nuevo marbete que se está utilizando por bien de la economía del país y la salud de los consumidores..
Dicho acuerdo, detalló, implica la colaboración de la autoridad tributaria para solucionar los problemas en materia administrativa y de carácter fiscal del sector así como intercambio de información sobre importación de bebidas alcohólicas y de materia prima a fin de identificar posibles irregularidades a las leyes fiscales y de comercio exterior.
Por tanto, dijo, existe sustento legal para hacer las solicitudes tanto al SAT como a la Profeco para controlar el contrabando, la subvaluación y la evasión de impuestos; en pocas palabras la ilegalidad; pues esta competencia desleal genera pérdidas económicas millonarias para el sector establecido y una evasión fiscal superior al 40 por ciento.
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