Fuente: Redacción
En México el 57.8 por ciento de los trabajadores mexicanos laboran en la ilegalidad, inhibiendo el fortalecimiento de las finanzas internas del país, advirtió la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo
Su presidente, Enrique Solana, destacó que el Régimen de Incorporación Fiscal, sin duda es el instrumento idóneo para combatir de manera frontal a la ilegalidad y hacer que más de la mitad de los mexicanos que no pagan impuestos, se conviertan a la legalidad y cumplan con sus obligaciones fiscales.
El combate a la ilegalidad es indispensable para el crecimiento de México; “el país no puede crecer mientras un 57.8 por ciento de todos los mexicanos estén fuera de la formalidad, sin contribuir al sostenimiento de la infraestructura nacional”.
En este sentido, Solana Sentíes demandó de las autoridades un mayor apoyo al impulso de las micro, medianas y pequeñas empresas, fuentes generadoras de más del 70 por ciento del empleo en el país y aportadora de la cuarta parte del Producto Interno Bruto nacional.
De igual manera, dijo que es preciso establecer estrategias en favor de las industrias nacionales, pues recordó que detrás de una empresa sólida se requiere de una industria generadora y abastecedora de productos, fuerte, sólida y confiable.
Destacó que es a través de la Concanaco y la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación en donde se brinda la representación natural de la clase media y baja empresarial; “la más necesitada y numerosa” por lo que reiteraron a las autoridades federales un mayor apoyo a este sector.
El dirigente de la Concanaco, sostuvo que las Micro. Medianas y Pequeñas empresas han desacelerado sensiblemente su actividad y la creación de nuevas fuentes de empleo porque el entorno mundial y nacional en que se desarrollan es negativo, a lo que se suman montos de financiamiento insuficientes.
Recordó que de acuerdo a las recientes estadísticas del INEGI, en México se cuenta con 4.1 millones de unidades económicas, las cuales requieren, para migrar de un estado de obsolescencia a uno de efectividad productiva y de competitividad, un alto impulso y apoyo por parte del gobierno federal.
En este sentido, el empresario criticó que mientras que a este sector se le limitan los recursos y el apoyo, al campo sele invierten más de 100 mil millones de pesos, cuando es un aportador de sólo el 4 por ciento del PIB.
De ahí que demandara balancear las cargas y equilibrar los recursos, pues si se quiere, dijo, que el PIB crezca a niveles del 6 y 7 por ciento se tiene que hacer que el 70 por ciento de los trabajadores del país generen lo que les corresponde.
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