Fuente: Redacción
Para que México pueda preservar la estabilidad económica y el grado de inversión ratificado la semana pasada por una de las tres grandes calificadores mundiales de crédito, se necesitan medidas urgentes como recortar más el gasto público, detectar y actuar donde hay corrupción y mejorar la seguridad pública, consideró la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
En su mensaje semanal, el presidente nacional de la Coparmex, Gustavo de Hoyos Walthers, dijo que “no podemos desconocer que una disminución de la calificación crediticia tendría un impacto negativo en las tasas de interés y en los flujos de capital hacia el país”.
El dirigente nacional de la Coparmex subrayó que fue una buena noticia la confirmación del grado de inversión de la deuda soberana de largo plazo de México, a la que se le mantiene bajo una perspectiva estable. “Esto, a pesar de que la calificación de Pemex había sido rebajada en las pasadas semanas”, señaló el empresario.
Destacó que la calificadora estima que la economía mexicana crecerá 2.8 por ciento en promedio entre 2016 y 2017 y que los desequilibrios macroeconómicos del país se mantendrán moderados.
El empresario señaló que México ha logrado sortear los shocks externos como la drástica caída de los precios del petróleo, la caída en la producción, y la mayor volatilidad mundial.
Subrayó que la buena noticia para México contrasta con la situación de Brasil, cuya calificación de deuda soberana fue revisada a la baja y colocada en perspectiva negativa por otra calificadora de riesgos.
Por ello, De Hoyos Walther consideró urgente tomar medidas para corregir a los factores de riesgo para México señalados por la calificadora, los cuales podrían hacer perder el grado de inversión de México. Entre éstos destacan la trayectoria de bajo crecimiento de la economía y las debilidades estructurales en las finanzas públicas en el contexto de la dependencia de los ingresos petroleros.
El empresario señaló que otros ámbitos de riesgo para México, según el mismo análisis crediticio, son el bajo nivel de intermediación financiera y las debilidades institucionales expresadas por la alta incidencia de violencia relacionada con las drogas y, desde luego, la corrupción.
El dirigente nacional del sector patronal consideró muy importante que México mande señales de que está haciendo su tarea para preservar la salud financiera, y con ello, su calificación crediticia.
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