Fuente: El Financiero
Los ingresos del sector servicios, principal motor de la economía mexicana, reportaron un descenso en marzo de 7.8 por ciento a tasa anual, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Lo anterior representó su peor caída desde diciembre de 2009, cuando tuvo un descenso de 8.44 por ciento.
Fue el 23 de marzo cuando en México entró en vigor la Jornada Nacional de Sana Distancia, una serie de medidas diseñadas para disminuir la propagación del COVID-19.
Entre estas, se estableció que los negocios considerados como no esenciales debían cerrar sus puertas.
De acuerdo con la Encuesta Mensual de Servicios (EMS), durante el tercer mes del año se observó un comportamiento negativo en siete de los nueve componentes que integran al sector.
La caída más pronunciada la registró el componente de esparcimiento, culturales, deportivos y otros servicios recreativos, que bajó 27.4 por ciento a tasa anual.
De igual manera, el componente de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas cayó 22.7 por ciento, y el de servicios de salud y de asistencia social, 12.3 por ciento.
Por el contrario, el mayor incremento lo registraron los servicios inmobiliarios y de alquiler de bienes muebles e intangibles, que avanzó 9.9 por ciento, y la información en medios masivos, 2.4 por ciento a tasa anual durante marzo.
El personal ocupado total decreció 0.7 por ciento anual, su menor nivel desde abril del año pasado. Las remuneraciones totales subieron 0.3 por ciento en el tercer mes del año, su menor incremento desde junio de 2018.
En la variación mensual, los ingresos totales por suministro de bienes y servicios privados no financieros retrocedieron 5.8 por ciento.
En este mismo sentido, el personal ocupado disminuyó 0.4 por ciento; los gastos por consumo de bienes y servicios descendieron 2.3 por ciento, y las remuneraciones bajaron 1.9 por ciento, respecto al mes inmediato anterior.
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