Por Norma Patiño
Con el fin de que los consumidores tengan acceso a una gran variedad de
bienes y servicios de calidad así como a mejores precios, mientras que los pequeños y medianos empresarios puedan acceder
a insumos competitivos e innovadores, el Presidente de la República, Enrique Peña
Nieto, enviará a la Cámara de Diputados la iniciativa para una nueva Ley
Federal de Competencia Económica.
La iniciativa brinda mayor certeza, transparencia y eficiencia al sistema
de competencia económica, aseguró el Secretario de Economía, Idelfonso
Guajardo.
En la elaboración de
esta iniciativa se tomaron en consideración las directrices fijadas en la
reforma constitucional en materia de telecomunicaciones, radiodifusión y
competencia económica.
Asimismo, la Secretaría
de Economía informó que se incluyó la instrumentación de las facultades
incrementales tales como ordenar medidas para eliminar las barreras a la
competencia y la libre concurrencia, regular el acceso a insumos esenciales
y ordenar la desincorporación de
activos.
La iniciativa refleja la
convicción de que la competencia económica es fundamental para que los
consumidores tengan acceso a una gran variedad de bienes y servicios de calidad
y a mejores precios, y los pequeños y medianos empresarios a insumos
competitivos e innovadores. Todo ello redundando en un mayor crecimiento
económico y en la generación de empleos bien remunerados.
A poco más de 20 años de
haberse aprobado la Ley Federal de Competencia Económica, resulta evidente que
no ha sido suficiente para garantizar una sana competencia en nuestra economía,
reconoció el titular de la dependencia.
En este sentido, la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos OCDE ha señalado
que los consumidores mexicanos gastan alrededor de 40% más en mercados con
problemas de competencia.
Asimismo, el Reporte del Foro Económico
Mundial sobre Competitividad Global 2013 – 2014, en el apartado titulado
“Efectividad de la Política de Competencia Económica”, ubica a México en el
lugar 114 de 148 del mundo, por detrás de países como Panamá (25), India (29),
Zambia (37), Brasil (40), China (55), El Salvador (59), Colombia (78), Honduras
(112).
Esta iniciativa de ley
presenta una estructura sistemática con mejor técnica legislativa en beneficio
tanto de la autoridad como de los agentes económicos regulados, en tres grandes
apartados:
De la Organización y
Funcionamiento, mismo que establece:
Su aplicación a todos
los agentes que participan en la actividad económica, independientemente del
sector, con las únicas excepciones que prevé la Constitución;
Un mecanismo para
definir las áreas de responsabilidad entre la Comisión Federal de Competencia
Económica y el Instituto Federal de Telecomunicaciones;
La integración de la
Comisión Federal de Competencia Económica, las atribuciones de sus funcionarios
y garantías a su actuación técnica, autónoma e independiente;
Mecanismos de control,
transparencia y rendición de cuentas que reduzcan los riesgos de captura;
Una autoridad
responsable de la investigación dotada de autonomía técnica y de gestión, y
El funcionamiento de una
Contraloría Interna que vigile el desempeño de los funcionarios de la Comisión
Federal de Competencia Económica.
2. De las Conductas
Anticompetitivas, se refiere a la parte sustantiva de la ley:
Define las conductas
anticompetitivas y prohíbe los monopolios, prácticas monopólicas, las
concentraciones ilícitas y las barreras que disminuyen, dañan o impiden la
libre competencia en la producción, procesamiento, distribución o
comercialización de bienes o servicios.
Retoma los conceptos de
la ley vigente respecto de prácticas monopólicas absolutas, prácticas
monopólicas relativas, determinación de mercado relevante, de poder sustancial
y concentraciones, en razón de que han probado en los últimos 20 años su
congruencia con el marco jurídico, e
Incluye dos nuevos tipos
de prácticas monopólicas relativas que sancionan la explotación abusiva de un insumo
esencial por parte del agente económico dominante.
3. De los
Procedimientos, define los procedimientos a seguir en la aplicación de los
temas sustantivos de esta iniciativa, estableciendo:
Un esquema de división
de funciones con pesos y contrapesos, de tal forma que la autoridad que realiza
la investigación no sea la misma que resuelva, y que la autoridad que resuelva
no sea la misma que revisa sus resoluciones, sino que están sujetas al control
judicial eficiente por parte de juzgados de distrito y tribunales colegiados
del Poder Judicial de la Federación especializados en la materia,
Eficiencia procesal con
procedimientos más cortos al limitar la posibilidad de interposición de
recursos que dilatan los procedimientos;
Fortalece las
capacidades sancionatorias de la Comisión al permitirle desincorporar activos
en la proporción necesaria para restablecer las condiciones de competencia
efectiva en los mercados.
Una serie de
herramientas y mecanismos que disminuyen la discrecionalidad de la autoridad,
brindan certidumbre jurídica y garantizan el debido proceso.
Por todo la anterior, la
iniciativa de la nueva Ley Federal de Competencia Económica es equilibrada y
refleja el justo medio entre la necesidad de contar con una agencia del Estado
mexicano eficaz en su misión de combatir a los monopolios y las prácticas
monopólicas, pero a la vez brinda mayor certeza, justicia, predictibilidad y
transparencia a todos los agentes económicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario