Fuente: El Universal
La depreciación que registra el peso frente al dólar durante este año no se ha traspasado a la inflación, lo que se trata de un hecho histórico, reconoció el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens.
Al comparecer ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, el responsable de la política monetaria del país informó que en los últimos meses la inflación se ha logrado ubicar dentro de los objetivos que tiene el instituto central (3% con una variabilidad de +/-1%).
Destacó que al mantener la inflación baja se protege al mercado interno, ya que desde el banco central es la mejor forma de ayudar a las familias.
"El último dato de la inflación se ubicó en 2.97%, que es la segunda más baja en la historia del Banco de México y que claramente muestra que estamos cumpliendo con los objetivos", detalló.
Agustín Carstens reconoció que persiste el reto de lograr una mayor penetración del créditobancario; sin embargo, dijo que entre los factores que han incidido en que aún se estén en niveles bajos es la afectación que ha tenido para la dinámica económica las secuelas de la crisis financiera internacional de 2008.
"Llevamos ocho años de letargo económico y eso afecta a cualquier país. Las tasas de crecimiento económico de México son insatisfactorias, pero es mejor que la que han tenido otros países, entre ellos de América Latina.
"Esto no es para dormirnos ni para volvernos complacientes, pero está el compromiso de alcanzar una penetración crediticia de 40% del PIB para 2018", indicó.
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