Fuente: Redacción
Alfredo Neme Martínez, vocero de la Asociación Mexicana para un Comercio Justo, advirtió que una tercera parte del maíz que se comercializa en centrales de abasto y mercados públicos es de importación, pues la producción nacional de este grano básico es de 22 millones de toneladas y 11 millones de toneladas son adquiridas en el exterior.
La estimación de Mayo pasado del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, se está confirmando conforme a los resultados consolidados hasta hoy; el mundo producirá mil millones de toneladas de maíz, pero en vez de premiar a los emprendedores, los está castigando desde ahora, al estar en menos de 149 dólares la tonelada, cuando hace dos años estaba en 348.
Esta situación, dijo, además de ubicar a México como un país dependiente del exterior en alimentos, los precios al productor se desploman y, los precios no cubren los costos de producción y mucho menos dejan una utilidad razonable al agricultor.
Asimismo, daña toda la cadena del sector comercio desde el productor, pasando por el comerciante mayorista y hasta llegar al consumidor final.
“En México, el vocero de la AMCJ dijo que, el gobierno federal debería fijar un precio objetivo de 4,000 pesos/tonelada, ya que con el precio internacional a la baja, los dos millones y medio de pequeños productores mexicanos de maíz, no alcanzaran ni a cubrir sus costos”.
El gobierno de los Estados Unidos, señaló Alfredo Neme Martínez, ha otorgado a los productores de maíz un precio objetivo actualizado aumentando 42 por ciento, mientras que el Gobierno Federal mexicano mantiene el ofrecimiento de 1,900 pesos la tonelada, sin ajustar a la alza el precio objetivo.
En entrevista, estimó que para pagar a los productores maiceros un ingreso objetivo para cubrir los costos de producción, se requiere por lo menos 2,500 millones de pesos para el ciclo primavera-verano 2014.
Para el próximo año, propuso aumentar a 12 mil millones de pesos el presupuesto 2015 para pagar el ingreso objetivo de todos los cultivos.
En el caso de no apoyar el ingreso objetivo de los productores agrícolas de granos básicos (maíz, fríjol, trigo, sorgo y soya), se tendría primeramente un impacto en la liquidez del productor, no podrá hacer frente al pago de financiamiento de la banca de desarrollo, banca comercial y el crédito usurero y caería en cartera vencida al siguiente ciclo agrícola.
Recordó Alfredo Neme Martínez que un problema que enfrentan desde el año pasado los productores es la caída de los precios del maíz, en un 56%, al pasar de 295 dólares la tonelada en 2012 a 130 dólares la tonelada en 2014.
Más aún, de acuerdo al reporte del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, pronostica una producción de más de 365 millones de toneladas e inventarios cercanos a los 30 millones de toneladas, esto hace más dramática la baja de precios del grano en el ciclo primavera-verano 2014 y que por segundo año consecutivo augura malas noticias.
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